La actriz francesa, mito del cine europeo, habla de su sempiterna depresión y del movimiento #MeToo en la presentación de su filme "Lola Pater" Hace un par de años Fanny Ardant (Saumur, 1949), actriz y directora, mito viviente del cine francés, confesó en una entrevista que era "pesimista por naturaleza", y que pasaba por la vida "con un gran velo negro sobre la cabeza". Para alguien que ha hecho de su sonrisa un arma de destrucción y de su carrera un canto al éxito y al trabajo bien hecho, parecería una declaración chocante. "Pues no te creas, ayuda mucho a construir los personajes. Porque cuando posees un poso de depresión entiendes los sufrimientos de los demás, los abandonos. Si fuera alegre de por sí, sin más, no sabría cómo interpretar el dolor". Con ese trasfondo, Ardant ha encarnado en Lola Pater a Lola Chekib, un transexual de orígen magrebí instalado en la Francia profunda que se reencuentra con su hijo, un veinteañero que...
Para escuchar y ver a Fanny Ardant